¿Hecho?

En mi libro recomiendo redactar recordatorios de forma que quede claro cuando algo está hecho. Evidente, cristalino, incuestionable. Tachado y a otra cosa.

Cuando eso no ocurre las alternativas casi siempre son dos: o nunca se termina (no se sabe cuando poner fin) o se alcanza un fin mediocre (esto ya me aburre así que supongo que es suficiente).

Ninguna es aceptable, así que podría merecer la pena prestar atención a esa propuesta.