Hoy no pero, ¿y mañana?

¿En qué consiste tu trabajo? ¿Te agrada? ¿No? ¿Qué debería cambiar para que lo haga? ¿Está en tu mano?

¿Es tu trabajo actual el que elegirías hacer, o lo cambiarías por otro? ¿Has pensado bien en qué te agradaría y qué no de ese nuevo al que cambiarías? ¿Aún así, sería esa tu elección?

¿Qué puedes hacer? Es probable que hoy no cambie nada, pero ¿y mañana?

Todo comienza con una pregunta, sigue con una respuesta y se materializa con determinación.