Cometer un error y no corregirlo es otro error. — Confucio
Si mientras has leído esta cita tu mente ha sido bombardeada por ocasiones en que esto te ha ocurrido y ocurre, acabas de descubrir un modo sencillo de cargarte con mucho más trabajo del que ya actualmente tienes.
Si, por el contrario, te has quedado como estabas, entonces es que habitualmente no descubres ni el primero de los errores.