El centro y las esquinas

Cuando tratas de conquistar un área regular necesitas hacerte con el centro. Es el lugar desde el que controlas más fácilmente todo el área, el lugar desde el que ningún punto está demasiado alejado.

Pero no puedes aparecer, por arte de magia, en su centro. Para conquistar el centro se comienza por las esquinas. Los puntos donde la fricción es menor, donde se produce un gran número de pequeñas conquistas que van sumando. Donde puedes ir avanzando y ganando terreno. Poco a poco.

Y ese es el secreto. Poco a poco. Las esquinas primero. El centro cae, cuando has avanzado lo suficiente desde cada una de ellas. Generalmente mucho es una suma de pocos que solamente entrega la constancia.