Hay mucha gente por ahí haciendo de todo, en este preciso instante. Cosas buenas, cosas malas, y entre todas ellas algunas fantásticas.
También podrías estar haciéndolas. La única barrera que debería interponerse entre tú y ellas se compone de ética y respeto, pero la realidad es que existen muchos otros ingredientes que no deberían estar ahí.
Están porque se lo permites. Ética y respeto, el resto sobran.