Tras varios meses de duro trabajo, te embarcas en un largo viaje para irte de vacaciones. Y tras unas vacaciones de descanso y disfrute, te embarcas en un largo viaje para regresar a casa.
¿Cuál pesa más?
La diferencia la marca la actitud, siempre. Saberlo te brinda la oportunidad para hacer algo al respecto.