Cogiendo rumbo y velocidad de crucero, tratando de caminar al lado de la organización que me acompaña. Así llego a mis jornadas en septiembre 2019.
Las anteriores han sido un éxito y estas prometen. Menos nervios, más confianza, igual ilusión.
Mar en calma y día soleado. Meses para disfrutar, sentir, guardar.